El SNS ofrecerá la reparación protésica de la lipoatrofia facial asociada al VIH
Si bien la esperanza y la calidad de vida de las personas que viven con el VIH ha avanzado de manera abismal en los últimos quince años, muchas de ellas experimientan los efectos secundarios de los medicamentos antirretrovirales que controlan la infección, los cuales surgen de manera variable en la toma rutinaria del tratamiento.
Entre los efectos visibles de la terapia antirretroviral -que son cada vez menos comunes y severos- uno de los que mas se teme por su percepción estigmatizante es la redistribución anómala de la grasa corporal, siendo la lipoatrofia facial la más perceptible por su evidente localización.
Actualmente, el Sistema Nacional de Salud cubre la cirujía reparadora de la lipoatrofia facial con grasa autóloga, si bien existen problemas de acceso en algunas comunidades autónomas de España. No obstante, las asociaciones de pacientes solicitaron la inclusión de las técnicas implantológicas en este campo.
Tal y como aparece en la Orden SSI/1356/2015 del Boletín Oficial del Estado, el Ministerios de Sanidad ha incluido en la cartera de servicios comunes del SNS el tratamiento con implantes quirúrgicos de la lipoatrofia facial asociada a la infección por el VIH, introduciendo una nueva alternativa terapéutica que sólo será contemplada ”en casos excepcionales”.
Según se desprende de la Orden ministerial, esta técnica se utlizará en los casos en los que no se pueda recurrir a la grasa autóloga, como es el casos de los hemofílicos. En dichos casos, serán las administraciones sanitarias competentes las que autoricen su realización mediante materiales sintéticos, que todavía no han concretado.
Cautela e insatisfacción tras el anuncio
Tal y como han recogido las agencias informativas, el secretario general de CESIDA, Miguel Luis Tomás, ha confrimado que esta medida ha sido solicitada por la Coordinadora; sin embargo, lamenta que e ‘no esté implantado para todos los casos’ criticando la inconcrección de la Orden
Asimismo, Tomás reclama una elección definitiva del tipo de implantes que serán sufragados para evitar que sea criterio específico de cada comunidad autónoma u hospital y fomente la desigualdad en el acceso a dicha prestación.
Tomás ha destacado que estos implantes son “muy importantes” para todos los pacientes, sobre todo para aquellos que ya han perdido mucha grasa en el cuerpo, por tanto, estima que son muchos los pacientes que querrán optar a este tratamiento.
En 2010, la Administración puso en marcha el uso tutelado de los tratamientos con grasa autóloga, llegando a la conclusión de su alta eficacia y seguridad, pero no fue hasta 2014 cuando se propuso la inclusión del tratamiento con grasa autóloga en la cartera común básica de servicios asistenciales en los casos de lipoatrofia facial asociada a la infección por el VIH.