Ella es la futbolista campeona mundial, feminista y activista por la comunidad LGBT

La futbolista Meghan Rapinoe es una de las integrantes de la selección de Estados Unidos que ganó la Copa Mundial de la FIFA Francia 2019.

A sus 34 años, además, fue galardonada con los dos reconocimientos individuales más importantes en el mundial, el balón y el botín de oro.

Pero Meghan no solo es futbolista profesional y campeona mundial, también es feminista y una importante activista a favor de los derechos de la comunidad LGBT.

Su novia, Sue Bird, es basquetbolista y también estuvo presente durante la final de la Copa. en el que las estadounidenses se enfrentaron y vencieron a Holanda 2-0.

Rapinoe salió del clóset en el 2012 y desde entonces ha sido una luchadora implacable por los derechos de la comunidad.

También apareció en la portada de la revista deportiva ESPN junto a Sue; se convirtieron entonces en la primera pareja homosexual que aparece en una portada de estas características.

Durante la Copa Mundial en Francia, la futbolsta aprovechó y exigió igualdad de condiciones en materia de salarios para las mujeres:

“Sin duda, no es justo, deberían duplicar ahora (lo que destinan al fútbol femenino) y luego usar esa suma para duplicarla o cuadruplicarla para la próxima vez. A eso me refiero cuando pregunto si nos sentimos respetadas”.

Dijo entender que el fútbol masculino es más rentable que el femenino, pero dejó clara su inconformidad de que la diferencia del premio es demasiada; la FIFA pagó a las campeonas del mundo 30 millones de dólares en premios, mientras que para los ganadores de la Copa Mundial varonil fueron 440 mdd.

“No creo que la FIFA nos tenga, en general, el mismo nivel de respeto que tiene hacia los hombres”.

Meghan recientemente hizo este reclamo al presidente Donald Trump, además de las declaraciones y acciones antiderechos que este ha hecho sobre la comunidad LGBT.

La respuesta del presidente sobre la igualdad de condiciones en el pago del salario a las mujeres profesionales del fútbol, solo fue:

“Primero deberán ganar algo para exigirlo”.

Luego del triunfo del equipo femenil estadounidense. el presidente las felicitó a través de Twitter; sin embargo, Meghan y sus compañeras se negaron a asistir a la Casa Blanca para reafirmar su protesta.

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