‘Rainbow Has’: luchando por dar voz a una juventud sexualmente diversa
El proyecto transnacional Rainbow Has busca proteger los derechos fundamentales de los menores de orientación homosexual o de identidad trans, así como de los hijos e hijas de familias homoparentales.
El objetivo de este proyecto es fomentar la diversidad afectivo-sexual y combatir el bullying o acoso homofóbico en el ámbito escolar, creando redes constituidas por los estamentos de la comunidad educativa, administraciones públicas, organizaciones sociales y ONG para garantizar la protección de esos derechos.
En el proyecto Rainbow Has han participado participan 14 entidades de 8 países de la Unión Europea -Alemania, Bélgica, Bulgaria, España, Holanda, Italia, Polonia y Reino Unido- que han realizado estudios, seminarios y reuniones con el fin de disponer de diagnósticos precisos sobre la situación de esos adolescentes, formular propuestas y recomendaciones y crear redes sólidas de colaboración y de trabajo en común.
”Hay que seguir trabajando”
En la conferencia europea, que ha tenido lugar en las dependencias de la Delegación del Gobierno Vasco en Bruselas, sus resultados han sido presentados ante integrantes del Intergrupo LGTB del Parlamento Europeo, de de NELFA, federación europea de familias homoparentales, así como representantes de la oficina del Defensor del Pueblo europeo, europarlamentarios y miembros de diferentes organizaciones y ONGs.
En la misma se han debatido los resultados de las cinco líneas de trabajo que consta el proyecto ‘Rainbow Has’ y se han expuesto tres ejemplos de buenas prácticas: del Gobierno Vasco, del Comberton College Academy de Cambridge y del Voyager School de Peterborough.
El Artaeko Lamarca ha indicado que las conclusiones de este proyecto son que aunque se ha ‘avanzado’ en esta cuestión y el ‘nivel de concienciación y sensibilización en Euskadi es muy alto’, sin embargo, ‘queda mucho por hacer’. En sus palabras:
(El objetivo es) ‘que el 100% de centros escolares del País Vasco asuman que hay que trabajar en materia de respeto a la diversidad afectivo sexual y el respeto a los derechos fundamentales de estos menores’.
De este modo, el Artaeko ha abogado por ‘implicar al conjunto de la comunidad educativa’ en esta tarea y ha indicado que el ‘reto’ está en que la educación afectivo sexual sea materia curricular, aunque ha recordado que esto es ‘competencia del Estado’.