Ficha técnica
‘Todos están muertos’
Director: Beatriz Sanchís
Guión: Beatriz Sanchís
Música: Juan Manuel del Saso, Juan Pastor, Aaron Rux
Fotografía: Álvaro Gutiérrez
Nacionalidad: Española
Reparto: Elena Anaya, Macarena García, Angélica Aragón, Nahuel Pérez Biscayart, Patrick Criado, Christian Bernal
Duración: 88 min.
Productora: Avalon P.C.
Página web: ‘Todos están muertos’
Calificación: 6 / 10
¿De qué va?
Lupe (Elena Anaya), es una sombra de lo que un día fue. En la década de los ochenta era la principal estrella del pop nacional y junto con su hermano conseguía convertir cada canción de su grupo (‘Groenlandia’) en un himno generacional.
Sin embargo, a finales de los noventa su vida es muy diferente. Lupe sufre agorafobia, la joven ha olvidado sus días como estrella musical para meterse en un demencial bucle por el cual malgasta sus días.
Lupe se ha quedado viviendo en el pasado y dejando pasar el presente, no asume la responsabilidad de criar a su hijo Pancho (Christian Bernal), y necesita que su madre Paquita (Angélica Aragón) se multiplique y haga las funciones de madre y abuela.
La cuestión de Pancho resulta especialmente preocupante. El hijo vive en una casa totalmente disfuncional y al llegar a la adolescencia comienza una batalla en su interior: la de la los problemas de la identidad sexual. Pancho también es un enamorado de la música y cuando en su grupo colegial entra un adolescente clavado a Kurt Cobain (Patrick Criado), descubre que más que amistad, lo que siente por el es amor.
Paquita, cansada de ver a Lupe convertida en una persona aislada y conflictiva y haciendo gala de su origen mexicano, decide hablar con su hijo Diego (Nahuel Pérez Biscayart) en la Noche de los Muertos. Diego vuelve a la casa con el aspecto de siempre: un chaval de veintipocos de mirada ausente, pero está muerto, es un fantasma.
A partir de aquí, la historia da una vuelta de tuerca. La aparición del hermano crea un ambiente difuso en el que lo real, lo fantasmagórico y lo onírico se funden. Así, de un modo fantástico surge una segunda oportunidad para Lupe que tendrá que decidir si quiere seguir acompañada por los fantasmas del pasado o decide tomar las riendas de su vida…
Tráiler – ‘Todos están muertos’
Sabías que…
- La película fue una de las triunfadoras del pasado Festival de Málaga (junto con ‘Carmina y amén’). De hecho, la cinta rodada por Beatriz Sanchís consiguió levantar cuatro premios: Mejor Actriz (Elena Anaya), el Premio Especial del Jurado, Mejor Banda Sonora y el Premio Especial del Jurado Joven.
- Aunque ya tenía una reputación en el mundo del cortometraje, ya había rodado ‘La Clase’ y ‘Mi otra mitad’, está película supone el estreno de Beatriz Sanchís en el mundo del largometraje.
- La película ha contado con recursos económicos de tres países diferentes: Alemania, España y México.
- La película supone el regreso al cine de Elena Anaya. La actriz había estado alejada de las cámaras desde que protagonizase ‘La piel que habito’ de Pedro Almodóvar.
Lo mejor…
- Una apuesta arriesgada. La apuesta de Beatriz Sanchís en su debut cinematográfico es de todo menos convencional.
La directora ha preferido no apostar por lo seguro y ha trazado una historia con numerosas aristas, que mezcla géneros cinematográficos, que superpone diferentes historias…y el resultado final resulta es el de una película con identidad propia.
- Los silencios. Elena Anaya nos muestra una actuación minimalista. La protagonista de la película consigue transmitir sus sentimientos no mediante los diálogos sino con los poderosos silencios que articulan la historia.
- Los problemas de la identidad sexual. El hijo de Lupe está en plena efervescencia adolescente y descubre que sus sentimientos hacia Víctor son mucho más cercanos al amor que a la amistad. La directora consigue dibujar un paisaje perfecto de los sentimientos que surgen cuando un adolescente lucha contra su homosexualidad: frustración, miedo….y aceptación.
Lo peor…
- Un historia difusa. Si hay que aplaudir a Beatriz Sanchís por la valentía de su apuesta, lo cierto es que el resultado final de la cinta está lejos de ser redondo.
- Ajena al espectador. La historia va transcurriendo ante los ojos del espectador, pero algo falla. Nos encontramos ante una cinta que se acerca al realismo mágico y que está cargada de lirismo, pero paradójicamente, le cuesta transmitir estos sentimientos.