Al igual que el objetivo de Vivian Maier ha servido para reivindicar la visión femenina en el mundo de la fotografía, el trabajo de Mapplethorpe se convirtió en el elemento visibilizador de numerosos temas prohibidos.
La cultura gay, el sadomasoquismo, el sexo interracial, el exhibicionismo…la cámara de Mapplethorpe ha servido para reivindicar la luz de los disidentes sociales. A través de sus íntimos retratos, el neoyorquino consiguió trazar una panorámica de lo subversivo para entablar un diálogo social en el que no existen los estigmas.
Los aclamados Fenton Bailey y Randy Barbato dirigen este documental, para el cual han contado con acceso ilimitado sin precedentes a los archivos y la obra del fotógrafo. Mapplethorpe pudo haber tenido cientos de amantes, pero sólo unas pocas relaciones importantes, la mayor parte de las cuales está presente en el filme.
Los recuerdos de su hermana mayor, Nancy, y de su hermano menor, Edward, completan el retrato de Robert. Artista y fotógrafo por derecho propio, Edward trabajó como asistente de su hermano durante muchos años y fue el responsable de gran parte de la excelencia técnica de su obra.
Pero la voz más importante en el documental es la del propio Mapplethorpe. Gracias a una serie de entrevistas redescubiertas, el fotógrafo se convierte en un narrador honesto, que abre su corazón para hablar sobre su vida, sus amores y su trabajo.
Todo visto a través de sus ojos; un todo sin fisuras, una completa obra de arte. El resultado es un retrato del artista que dedicó su vida no sólo a convertirse en tal, sino también a hacer de su medio elegido, la fotografía, un arte valorado y respetado.
La cinta se podrá ver en Documenta Madrid el próximo 4 mayo a las 18H en la Cineteca del Matadero.