El sacerdote y teólogo José María Castillo ha defendido a la comunidad LGBT al asegurar que ellos no son quienes deberían recibir ayuda para “corregirse”.
“Las personas que van por la vida empeñados en ‘curar’ o ‘corregir’ a los homosexuales deberían pensar en serio que, seguramente, quienes más necesitan curarse o corregirse son ellos mismos”, asegura.
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El teólogo de 89 años es bien conocido por expresar sus inconformidades y su forma de pensar; en esta ocasión ha compartido una fuerte reflexión contra la jerarquía de la iglesia.
Indica que las personas religiosas que se oponen, y hasta se enfrentan, a los homosexuales, no han reflexionado sobre todo el daño que hacen a la humanidad y a la iglesia misma.
“El individuo, que se ve calificado como un ‘maricón’ (o ‘maricona’), si es que quiere verse respetado y apreciado, no tiene más remedio que ocultar su propia identidad (…) Con la confusión, la oscuridad, las dudas y el desagradable sentimiento de verse rechazado e incluso despreciado hasta límites y en condiciones que seguramente no imaginamos. Evidentemente, es una ‘canallada’ condenar a una persona a que viva así”.
De igual forma, expresó su indignación ante la existencia de clérigos que luchan por desaparecer a la comunidad LGBT mientras mantienen silencio sobre la corrupción.
Incluso recordó que la homosexualidad se presenta también en otras especies animales, y que dichas conductas han sido estudiadas y explicadas científicamente.
“En realidad, el más desquiciado es el que emite un juicio negativo y dañino sobre seres humanos (…) Sin duda alguna, la sexualidad es variable y se concreta en modalidades distintas (…) Si la naturaleza nos ha hecho así a los seres vivientes, respetemos la realidad tal cual es”, finalizó.