La besada junto a la sede del Obispado de Getafe se salda con gran éxito

A besazos contra la discriminación. Este fin de semana, la asociación Gaytafe LGBTI+ ha organizado una besada pública frente a la sede del Obispado de Getafe para responder a la carta firmada por Joaquín María López de Andújar (obispo de la localidad) y Juan Antonio Reig Pla (obispo de Alcalá de Henares) en la que vertían duras críticas contra la ley contra la LGTBfobia.

La carta firmada por los obispos ha prendido una mecha de odio que ha sido avivada por otros representantes de la Iglesia Católica. En este vergonzoso camino, hay que destacar las declaraciones ofrecidas por el obispo de Córdoba que se ha ganado un puesto de honor dentro de las figuras públicas más LGTBfóbicas del año al indicar que la ideología de género es como ”una bomba atómica”.

Ante este panorama hostil, Gaytafe LGBTI+ ha utlizado las armas del amor y la conciencia. Así, el sábado a las 18:30 se organizó una besada para curar la LGTBfobia y tras esta acción se leyó un comunicado para mostrar el más absoluto rechazo a la postura tomada por una parte de la jerarquía católica de nuestro país.

Durante la lectura, han indicado que la Ley Integral contra la LGTBIfobia ‘ni contradice la moral natural, ni anula la enseñanza pública de la Iglesia, ni prohíbe rezar por quien pretenda cambiar la orientación de su vida, puesto que dicha ley en ningún momento conculca la libertad religiosa y moral’.

Contra la impunidad del odio

Han querido señalar que ‘La Ley Integral contra la LGTBIfobia no ataca a las libertades religiosas, educativas, de expresión, de cátedra o científica, sino que pretende que las personas LGTBI tengamos los mismos derechos y nos veamos reflejados en espacios donde hasta ahora estábamos totalmente invisibilizadas o incluso donde se violaban sistemáticamente nuestros derechos’.

También se hizo mención a una de las partes más conflictivas del discurso eclesiástico: el de las terapias curativas. Desde la asociación les parece ‘gravísimo e irresponsable que se defiendan las terapias de curación de la homosexualidad, bisexualidad y transexualidad, cuando está demostrado que dichas terapias son muy peligrosas para la integridad física y psíquica de quienes se someten a ella y que constituyen un riesgo para la salud pública, por no hablar de la dudosa legalidad de los métodos que se emplean en las mismas, dignos de una película de terror’.

Para finalizar, se ha instado a las instituciones a ‘que se tomen medidas contra los autores’ por entender que el comunicado de los obispos ‘exhorta al odio y la discriminación contra las personas LGTBI y que puede ser constitutivo de delito en función de la legislación vigente que previene tales manifestaciones y a las cuales no entendemos amparadas ni por la libertad de expresión ni por la libertad religiosa’.

This website uses cookies to improve your experience. We'll assume you're ok with this, but you can opt-out if you wish. Accept Read More