‘El Antidisturbios’: la vida no da lecciones gratis

‘El Antidisturbios’

Reparto – Eugenio Gómez y Lucía Barrado

Texto – Félix Estaire

Dirección – Patricia Benedicto

Vestuario/Escenografía – Lúa Testa

Iluminación – David de Diego

Producción -Teatro de Acción Candente, S.L. 

Dónde: Teatro Galileo 

Cuándo: Del 16 de octubre al 20 de noviembre

Horarios: Jueves 22:30

Precio: Desde 14€

Más información: Grupo SMedia

¿De qué va?

El grupo teatral Smedia lleva tiempo mostrándonos las diferentes caras del teatro. Sus producciones nos han hecho reír a carcajadas, nos ha inyectado el duende del flamenco, nos ha hecho viajar hasta el terreno de lo clásico, nos ha mostrado lo absurdo de la existencia y –por supuesto- nos ha hecho pensar.

‘El Antidisturbios’ pertenece a este último tipo de obras cuya principal intención es la de crear un espacio de debate, un paisaje reflexivo que nos lleve hasta la cuestión primera y última: la búsqueda, en ocasiones furiosa, en otras introspectiva, de la esencia de nuestra existencia.

El comienzo de la obra es como un disparo a bocajarro. ”Soy el agente de antidisturbios número 1.245 y cuando vean este vídeo yo ya estaré muerto”…a partir de este planteamiento explosivo se estructura una historia dramática y con un claro sabor shakesperiano.

A lo largo de aproximadamente 60 minutos podemos ver el mundo desde los ojos de un veterano agente antidisturbios que realiza un repaso a su vida. Anhelos, frustraciones, toma de conciencia, rencores, sentimientos cruzados y una relación con su hija que se ha hecho jirones por el paso del tiempo.

Influencia clásica

Los problemas en la relación entre padre-hija que se establece en la obra van mucho más allá de la típica diferencia generacional. Su distancia es mucho más profunda, puesto que se encuentra en el propio concepto de la existencia. Su hija, activista de izquierdas, representa el lado idealista, mientras que su padre, viva imagen del hastio y la decepción, se ha transformado en una especie de cínico nihilista.

Sin embargo, el debate principal que subyace de la obra se centra en la figura del antidisturbios. ¿Cómo se puede sentir en un operativo?, ¿en qué piensa?, ¿a quién defiende?…como en el ‘Coroliano’ de Shakespeare, las preguntas van de lo concreto a lo universal para trazar un completo mapa del ser humano.

El texto de Félix Estaire realiza un camino circular, orbita sobre los mismo planteamientos de manera recurrente. A través de los diálogos entre padre e hija y los monólogos del personaje principal (una mención especial a la soberbia actuación de Eugenio Gómez llenando el escenario de rabia, furor y sentimientos amargos) se establece un debate con el espectador, un debate que exige una participación activa.

Con un montaje vanguardista y de carácter cinematográfico, la obra va creciendo en intensidad y dramatismo hasta explotar en los minutos finales. La figura del antidisturbios se nos dibuja como una metáfora social. El agente tiene sombras, pero se limita a defender a las personas que empujan a la gente a la violencia…una violencia de la que forma parte y de la que nosotros tampoco estamos exentos.

Vídeo: Promo ‘El Antidisturbios’

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