Mientras Ryan Goslin subía a recibir el Globo de Oro como mejor actor de comedia o musical, Ryan Reinolds y Andrew Garfield se daban un beso con sabor a pasión adolescente.
Un beso que se ha convertido en uno de los momentos más virales de la ceremonia y que, a juzgar por las declaraciones del propio Reinolds, también se puede convertir en el spoiler más divertido y sexy de la historia del cine.
Los más aficionados al mundo del cómic ya conocían la figura de Deadpool, un superhéroe pansexual, gamberro, obsceno, transgresor y tremendamente divertido.
Lamentablemente, en el estreno del superhéroe en el mundo del cine, pudimos ver casi todas las claves que han convertido a Deadpool en uno de los favoritos de los fans del cómic. Sin embargo, la película nos ofrecía muy poco -por no decir nada- de la pansexualidad de la que presume el héroe en sus historias de papel.
Algo que podría cambiar en la segunda parte de su saga cinematográfica. Así lo ha asegurado el propio protagonista en una entrevista concedida a ‘Variety’ en la que ha indicado que:
Lo que significa el amor para Deadpool no puede ser igual a lo que es el amor para Batman o cualquier otro. Creo que esto podría ser llevado más allá, porque él es un ‘outsider’ en todos los aspectos’
En la misma línea se ha expresado el coguionista de Deadpool 2, Rhett Reese, que se hizo eco de las palabras de Reynolds sobre el tema y, de la misma manera, espera que la pansexualidad sea algo que puedan explorar en el futuro: ‘la mayoría de los héroes de los cómics han sido heterosexuales u homosexuales, y lo encontramos interesante y revolucionario, pero espero que se pueda evolucionar a algo más’.